Nuevas regulaciones en promociones empresariales: implicaciones para las empresas

Recientemente, la Autoridad de Fiscalización del Juego (AJ) ha introducido cambios significativos en el panorama de las Promociones Empresariales con la emisión de la Resolución Regulatoria Nro. 01-00002-24. Esta nueva regulación, que reemplaza al anterior reglamento (Resolución Regulatoria Nro. 01-00002-21), ha generado un interés sustancial entre las empresas que desarrollan Promociones Empresariales, por lo que, es esencial entender los nuevos aspectos y desafíos que esta nueva reglamentación presenta.

Aunque en primera instancia los cambios pueden parecer discretos, un análisis minucioso revela ajustes que tienen un impacto directo en las estrategias comerciales y de marketing.

Uno de los cambios más destacados es reflejo de la creciente importancia de la tecnología en el ámbito empresarial, que ofrece nuevas oportunidades para la innovación en este sector. El nuevo reglamento regula de forma expresa el uso de herramientas informáticas en el desarrollo y gestión de las Promociones Empresariales. Vale mencionar que, si bien en la práctica la entidad regulatoria ya lo venía realizando, la nueva norma la habilita de forma expresa para verificar mediante sus técnicos e inspectores el buen funcionamiento de aquellas herramientas informáticas a utilizarse en la promoción empresarial. Tener esto en cuenta resulta importante para las empresas con el fin evitar demoras y/o rechazo de solicitudes de autorizaciones de promociones empresariales y de esta manera, poder aprovechar la tecnología para mejorar la eficiencia y efectividad de las campañas o proyectos que llevan a cabo.

Asimismo, los lineamientos en el nuevo reglamento sobre el «pago por derecho de participación» y la prohibición de realizar modificaciones durante la ejecución de ciertas actividades comúnmente conocidas como proyectos permanentes, clubes de puntos o programas de descuentos (referidas reglamentariamente como “actividades no alcanzadas por la normativa de promociones empresariales”), son aspectos que requieren una atención especial por parte del sector empresarial, ya que pueden tener implicaciones legales y económicas significativas. La prohibición de modificar los denominados proyectos permanentes, si bien ya estaba recogida en el anterior reglamento, tenía un carácter más general y menos incisivo. Los nuevos ajustes en materia podrían limitar la flexibilidad de las empresas, lo que a su vez implica que se requiera una planificación más cuidadosa de las estrategias comerciales, a efectos de dar cumplimiento a la norma y evitar sanciones administrativas.

Otro punto crucial es la mayor supervisión de las actividades con fines benéficos puesto que, la autoridad, mediante este nuevo reglamento, queda facultada para controlar las mismas y sancionarlas cuando no cumplan con su propósito humanitario. Lo mencionado, podría traducirse en un riesgo de sanción mayor para las entidades o personas que realicen actividades de beneficencia, pudiendo dejar la puerta abierta a depender del criterio del fiscalizador. En consecuencia, una gestión rigurosa en materia de promoción empresariales, por parte de las referidas entidades y personas, cobra mayor importancia.

Por otro lado, existen otros aspectos que han sido modificados y/o introducidos en este nuevo reglamento, tales como la permisión expresa de excluir ánforas dentro de una promoción empresarial, la exigencia de que no exista ningún tipo de condición en los campañas de imagen empresarial, modificaciones reglamentarias en cuanto a los diferentes respaldos a ser presentados sobre el valor de los premios ofertados en caso de premios donados y/o producidos por la misma empresa, al igual que la ampliación del plazo de 2 a 3 meses para finalizar con los trámites de perfeccionamiento del derecho propietario del ganador en premios sujeto a registros, entre otros temas.

En resumen, las nuevas regulaciones en Promociones Empresariales tienen el potencial de impactar en múltiples aspectos de las operaciones comerciales de las empresas, presentando desafíos a tener en cuenta. Es fundamental que las organizaciones estén al tanto de estos cambios y se adapten de manera proactiva para garantizar el cumplimiento normativo de todos los aspectos legales que conlleva una Promoción Empresarial.